Privacidad adolescente

Cuando se trata de un adolescente el tema de la privacidad suele ser muy complicado. Si bien algunos padres intentan confiar en sus hijos, otros tienen más problemas pues desde que llegó a la adolescencia y se volvió punk, rocker, emo o simplemente más serio, ha sido muy difícil saber de qué va la cosa.

Lidiar con la adolescencia de tu hijo no va a ser nada fácil, creerá que lo sabe todo, que nada es demasiado peligroso y que hay que ocultarte varias cosas. Mucho dependerá del tipo de educación que le hayas dado, si desde niño fue caprichoso debes tener cuidado porque será muy difícil; pero si suele ser abierto contigo, es posible que recibas menos portazos.

En la sexualidad

• ¿Fuiste accesible para hablar de educación sexual con tu hijo? No te engañes, en muchas escuelas es un requerimiento; pero si ha sentido que es un tema prohibido, posiblemente no te enteres de su primera, segunda o tercera relación de noviazgo. Debe haber apertura desde el comienzo con el tema de la sexualidad sin caer en libertinajes.

• Si te confía que ya tiene novio o novia, intenta conocerlo, si es posible invítalo a comer. Saber cómo habla de su familia, cómo piensa y cómo se comporta, te dirá más que espiarlos a través de la ventana cuando se despiden.

• Si sientes que es una persona que no le conviene dale tu opinión sin entrar en histerias; tampoco intentes separarlos por la fuerza, pues sólo harás que se encapriche más.

Con los amigos

• Las anécdotas de quién iba mejor vestida o el detalle de cómo el chico más guapo del salón se arregló el fleco pueden parecerte aburridas, pero si no pones atención, no estarás al tanto de quienes son las amistades de tu hijo

• Memoriza nombres y asiste a eventos escolares para estar al día en los detalles cotidianos

• En cuanto a la privacidad se refiere no intentes “ser uno más del grupo”. Querer recobrar tus años de chismes o ser uno más de los muchachos es un grave error que no puedes cometer si quieres que te tomen en serio

• Si sus amigos van a tu casa, trata de revisar qué están haciendo de cuando en cuando, pero no te invites a la fiesta de pijamas

En el ciberespacio

• No puedes desconectar a tu hijo de la tecnología, es verdad que ocupa la computadora para cosas de la escuela, y de paso, esto significa que también formará parte de redes sociales y chats en línea

• A pesar de los peligros no prohíbas que tu hijo forme parte de una red social. En vez de eso, crea tu propio perfil en la misma red y pon como regla que tu hijo te acepte como “amigo”, de esta manera podrás monitorearlo sin ser invasivo

• Si se rehúsa, entonces ponte alerta porque te oculta algo. La computadora familiar siempre debe estar en un lugar en el que puedas ver qué está haciendo sin ponerte a leer lo que están hablando

• Si tiene computadora personal, prohíbe que se encierre, de manera que puedas entrar de “sorpresa”.Habla con tu hijo de los riesgos de conocer gente en el internet sin sonar alarmista.